Recuerdo aquella escena de Peter Pan al inicio del cuento, cuando entra en la habitación de Wendy y sus hermanos persiguiendo a su fugada sombra, la cual se había escondido allí. Hace unos días alguien decidió darle la vuelta a la frase que acompañaba a este ángel y me regaló una nueva versión, "Un ser oscuro donde más brilla es en la luz" y eso también me hace recordar otra ocasión en la cual uno de mis maestros de reiki me dijo que "el modo de acabar con la oscuridad es muy fácil, solo hay que encender una luz." Primero hay que asumir que se está en la oscuridad, de lo contrario difícilmente se buscará el interruptor que encienda la luz que la ilumine.
Esta nueva versión de esta frase, lo repito, la recibo como un regalo, como una oportunidad para dialogar con mi sombra y reflexionar al respecto, es gracias a ella que están siendo posibles estas palabras. Es el momento de empezar a abandonar la estigmatización a cuenta de nuestras sombras.
Si incluso Peter Pan, o mejor dicho quien creó al personaje, entendió que no podía ir por el mundo sin su sombra, nosotros tampoco debemos permitir que la nuestra huya, se de a la fuga, se esconda por los rincones, ha de expresarse, mal que nos pese, y una vez que ha abandonado su escondrijo y tenemos el valor de asumir que está ahí, aceptarla, colocarla en su justo lugar y que le sea útil a nuestra luz.
Primer paso, reconozcamos nuestra sombra. Este Ángel vive en la noche para no olvidar que la oscuridad existe, inclusive en si mismo, y que puede serle útil y necesaria a la luz.
Acabo con otra frase y a través de ella otro recuerdo a un hombre que considero fue mi primer maestro, un profesor de Diseño Gráfico que tuve en mi época de estudiante de arte, un hombre humilde y sabio, y un verdadero genio es su oficio, mi recuerdo, homenaje y su legado en estas palabras "La vida es como un cuadro, ha de tener sus luces y sombras, así es como se logra volumen y profundidad."
Acabo con otra frase y a través de ella otro recuerdo a un hombre que considero fue mi primer maestro, un profesor de Diseño Gráfico que tuve en mi época de estudiante de arte, un hombre humilde y sabio, y un verdadero genio es su oficio, mi recuerdo, homenaje y su legado en estas palabras "La vida es como un cuadro, ha de tener sus luces y sombras, así es como se logra volumen y profundidad."
Mi más sincero agradecimiento a quien me ha hecho este regalo y me ha dado esta oportunidad.
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