La historia de un Ángel Bemol





Ilustración y cuento de Rosa de Soto (Ángel Bemol) todos los derechos reservados

Os lo dejo también aquí debajo por si no se lee bien:


CUENTO DE UN ÁNGEL BEMOL

Erase una vez un ángel al que le gustaba mirar las estrellas, siempre estaba sentado en la nube más alta, con el tiempo aprendió a entender su lenguaje, a identificarlas, sabía cuándo una moría y aparecía otra nueva, no le importaba estar rodeado de esa oscuridad nocturna pues solamente veía las estrellas. Un día fue a hablar con Dios:

- ¿Hay algún otro lugar en el universo donde se puedan ver estrellas en medio de la oscuridad? - Le preguntó

- Si, lo hay. - Contestó Dios.

- Me encantaría conocer ese lugar. - Le dijo el ángel.

- Te advierto que esa luz de la que hablo, no se encuentra tan a la vista como las de estas estrellas y no siempre te será fácil verla. - Le explicó Dios.

- No importa. - Dijo el ángel. - Quiero saber de ella.

Entonces Dios envió al ángel a la tierra, como un ser humano más, le quito las alas y le borró su memoria de ángel. Rió, lloró, amó, sufrió, cayó, se levantó, se equivocó, decepcionó y fue decepcionado, sintió miedo, confusión, incomprensión, buscaba la soledad y el silencio. En la noche a veces miraba al cielo con sus ojos de humano y en las estrellas encontraba algo que le resultaba familiar, aunque no sabía muy bien el que, ni porque. 
Un día conoció a alguien muy especial que le hizo recordar quien era en realidad, dándole un nuevo nombre, Ángel Bemol, él a su vez descubrió una luz y a un ser también mágico en esa persona, luego se dio cuenta de que podía hacer lo mismo con otros, que podía descubrir donde estaba la luz en medio de la oscuridad, estaba en cada ser que se encontraba en su camino, aunque ni ellos mismos fuesen conscientes de ello.

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